¿Cómo vivir con mononucleosis?

Contagio de mononucleosis

Entre los trastornos que afectan al bazo, la esplenomegalia describe un aumento exagerado de su volumen, resultado de diversas patologías; el tamaño del bazo aumenta hasta el punto de que la presencia del órgano se percibe mediante una simple palpación médica.

Como hemos visto, la extirpación quirúrgica del bazo se realiza en casos de esplenomegalia grave.

El término médico esplenomegalia indica un agrandamiento del bazo más allá de los límites de su tamaño normal. A menudo, pero no siempre, la esplenomegalia se asocia con el hiperesplenismo: el bazo se vuelve excesivamente productivo, perjudicando al organismo y desencadenando los síntomas y complicaciones típicos de esta enfermedad.Leer

Mononucleosis por cuánto tiempo no puedo besar

La mononucleosis infecciosa comienza generalmente con un repentino dolor de garganta (faringitis aguda) caracterizado por la presencia, en el arco amigdalino, de un enrojecimiento y una pátina gris blanquecina (exudado) que a menudo sugiere infecciones bacterianas estreptocócicas y estafilocócicas.

Por lo general, las molestias duran unas semanas, y en algunos casos incluso unos meses, y luego desaparecen gradualmente sin consecuencias para el organismo. En aproximadamente un tercio de los casos, también puede haber dolor abdominal causado por la afectación del bazo o del hígado.

En caso de infección, los valores del número de glóbulos blancos en la sangre mostrarán un aumento del número de linfocitos (linfocitosis) y una forma anormal (morfología) de los linfocitos y monocitos.

En el caso de una alteración hepática, pueden aumentar los valores en sangre de ciertas proteínas presentes en el hígado, las transaminasas hepáticas, y de la bilirrubina, una proteína derivada de los glóbulos rojos.

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Síntomas de reactivación del virus de Epstein-barr

Contraje una mononucleosis que se manifestó a principios de julio de 2008 con unos síntomas bastante clásicos: temblores nocturnos desde el principio, fiebre constante de 37,5, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor de garganta y amigdalitis relacionada. Confundida principalmente con una amigdalitis bacteriana (tratada con antibióticos, ¡afortunadamente no con amoxicilina!) diagnosticada sólo a principios de septiembre (IgG superior a 600), a día de hoy, a pesar de una leve terapia con cortisona (bentelan durante una semana), dos meses y medio después de la aparición de la enfermedad, sigo teniendo los ganglios linfáticos inflamados y un cierto cansancio, sobre todo por la noche, aunque la fiebre ya haya pasado hace unas semanas. Quería saber si hay algún tratamiento homeopático o similar (estoy tomando supradin, pero sólo como complejo vitamínico) que pueda ayudarme a superar este impasse y también, dado que el virus permanece latente en el organismo, si es posible erradicarlo o al menos subir mis defensas inmunitarias. Gracias

Pero la mononucleosis _es_ la fase aguda de la infección por el VEB. Una vez superada la fase aguda, también lo es la enfermedad (dolor de garganta intenso, fiebre -¡y no fiebre! -, adenopatías, hepatoesplenomegalia, transaminasas elevadas, IgM elevada, anticuerpos heterófilos, inmunoblastos en la periferia, etc.).

¿Después de cuánto tiempo se puede contraer la mononucleosis?

El diagnóstico clínico de la mononucleosis se realiza mediante el reconocimiento de los síntomas de la enfermedad. Los análisis de sangre pueden ayudar a confirmar y detectar la presencia de anticuerpos específicos contra el VEB. Como ya se ha explicado, la aparición de signos como el malestar, la fiebre, el aumento de tamaño de los ganglios linfáticos y otros, hacen sospechar que se trata de una mononucleosis.

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Los alimentos permitidos son la pasta, el arroz, el pan, la leche, el yogur y el queso bajo en grasa, la carne magra, el pescado, los huevos pasados por agua, las verduras, las legumbres, la fruta, el azúcar, la miel, la mermelada, el jamón y la bresaola.

La información médica contenida en este sitio es puramente informativa y en ningún caso sustituye el consejo, el diagnóstico o el tratamiento impuesto por un médico y no reemplaza la relación médico-paciente. Siempre recomendamos que consulte a su médico o a un especialista para cualquier indicación.

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