¿Qué es bendecir a una persona?

Significado de la bendición en la Biblia

Además, en las palabras de bendición de Francisco, podemos percibir la fuerza de la fe en un Padre que “dice bien”, “bendice bien” a sus hijos porque los ha creado, los ha querido antes de que nacieran y los ama con un amor infinito. La bendición de Dios se conjuga con estos verbos: guardar, mostrar el rostro, tener misericordia y dar paz. Todas las acciones de un padre que alienta a sus hijos y al mismo tiempo los protege, porque está presente con una mirada amorosa que sigue su camino.    (Revista St Francis – haga clic aquí para saber cómo suscribirse)

Bendición

Las bendiciones siempre han recorrido la vida de los fieles con fórmulas ancestrales, rituales compuestos por gestos que muy a menudo damos por sentados, pero que en cambio expresan una herencia milenaria, densa de significados (y significantes) que hunden sus raíces en la propia historia de la religión.

Que el Señor todopoderoso y misericordioso te conceda la indulgencia, la absolución y la remisión de todos tus pecados, un período de auténtico y fructífero arrepentimiento, un corazón siempre penitente y una conversión de vida, la gracia y el consejo del Espíritu Santo, y la perseverancia continua en las buenas obras.

Las bendiciones que el Padre Pío concedía a sus devotos, por tanto, se centraban precisamente en esta invitación a dejar de lado todo trabajo, toda pena, y a confiar en Dios y en su infinita misericordia, a amarlo por encima de todo, y a esperar con confianza los frutos de ese amor.

Muchos animales, por la propia providencia del Creador, participan de alguna manera en la vida de los hombres, porque les prestan ayuda en su trabajo o les administran alimentos o les sirven de alivio. Por tanto, nada impide la costumbre de invocar la bendición de Dios sobre ellos en determinadas ocasiones, por ejemplo, en la fiesta de un santo.

Efectos de la bendición

En el Nuevo Testamento se mantiene el mismo orden de ideas que en el Antiguo Testamento (teniendo siempre presente la inversión Evangelio-Ley). Véase la bendición de Simeón (Levítico 2:34) y especialmente en la epístola a los Hebreos (6:7,14; 7:1,6,7; 11:20,21; 12: 17). El pasaje de 1 Corintios 14:16 debe examinarse a la luz del problema de la glosolalia. En cuanto a la “copa de bendiciones” de 1 Corintios 10:16, véase Santa Cena.

Cumplimiento de la promesa. En la misión de Pablo a los gentiles, el cumplimiento de la promesa hecha a Abraham se realiza en Cristo. Cf. Génesis 12:3 y Gálatas 3:8: “Para que la bendición de Abraham llegue a los gentiles”, “en Cristo” (14). Cf. también Hechos 3:25 con Génesis 22:18.

En el culto cristiano. El Nuevo Testamento contiene varias fórmulas de bendición que se utilizaban frecuentemente en las asambleas de la iglesia (Gálatas 6:18; Filipenses 4:23; 1 Corintios 16:23; 2 Corintios 13:13).

Hay varios tipos de bendiciones que se utilizan para diferentes momentos de la vida o en relación con diferentes tipos de objetos o bienes, ya sean sagrados o de uso secular. Las fórmulas de bendición, junto con extractos bíblicos y oraciones apropiadas, se recogen en un ritual conocido como Ritual de Bendición.

Bendición para decir bien

En este nuevo artículo, queremos guiarte a través de la tradición que acompaña a la bendición de las casas. Si usted también se pregunta por el significado y la historia de este importante gesto, ha encontrado el artículo adecuado.  Siéntese y empiece a leer.

Incluso en el Antiguo Testamento se daba gran importancia a la bendición y la maldición de los patriarcas. La bendición era dada por Dios, pero también podía ser ejercida por los ministros de Dios pronunciando la “palabra eficaz”.

Hay dos fórmulas diferentes, una larga y otra corta.  A la oración de bendición le sigue el esparcimiento del agua bendita en el interior de la casa, acompañado de la fórmula: “Revive en nosotros, Señor, en el signo de esta agua bendita, el recuerdo del Bautismo y la adhesión a Cristo Señor, crucificado y resucitado para nuestra salvación. Amén”. (Benedizionale, nº 456.466).

En las iglesias que siguen el rito romano, la tradición dicta que la bendición de las casas se realice con ocasión de la Pascua. Una explicación puede encontrarse en la lectura del pasaje sobre la Pascua en el libro del Éxodo (12:1-14).