¿Por que funcionan los mantras?

Mantras a recitar

El término mantra deriva de la combinación de dos términos: el verbo sánscrito man (8ª clase, en su acepción de “pensar”, de donde manas: “pensamiento”, “mente”, “intelecto” pero también “principio espiritual” o “aliento”, “alma viva”) unido al sufijo tra que corresponde al adjetivo sánscrito kṛt, (“que realiza”, “que actúa”)[1].

En cambio, una etimología tradicional hace derivar el término mantra de nuevo del verbo man, pero vinculado al sánscrito tra que, en las terminaciones compuestas, se convierte en un adjetivo con el significado de “que protege”, de ahí “pensar, pensamiento, que ofrece protección”[2].

“Los mantras ‘probados’ dan resultados seguros en un tiempo determinado. Los mantras “que ayudan” dan buenos resultados si se repiten en el rosario, o si se utilizan para acompañar las oblaciones. Los mantras “consumados” dan resultados inmediatos. Los mantras del ‘enemigo’ destruyen a los que quieren usarlos”.

“¡Esfera terrestre, esfera del espacio, esfera celeste! Contemplemos el esplendor del espíritu del sol, el creador divino. Que guíe nuestros espíritus [hacia la realización de los cuatro propósitos de la vida]”.

Textos de mantras

Nichiren, un monje reformista del siglo XIII, reformó la forma de practicar el budismo centrando la práctica en el estudio del Sutra del Loto. Nichiren considera que el “Rey Demonio del Sexto Cielo” es el líder de todos esos deseos negativos, que interviene para desviar al Buda del despertar. Citando algunas palabras:

Al no disponer de una gran sala ni de un gran número de participantes para recitar el Daimoku, tuve que conformarme con el vídeo de arriba y empezar a analizar la pista de audio.

El sonido comienza su movimiento desde los pulmones empujando el aire hacia la laringe, donde encontramos las cuerdas vocales, sube hacia la faringe saliendo finalmente por la boca o la nariz. Cuando pronunciamos la vocal U, los labios están muy apretados y, al pasar el aire, empiezan a vibrar. Aquí oímos vibrar la garganta, el pecho y la boca. Continuando con la vocalización entre la vocal A y la E, el sonido comienza a moverse primero bajo nuestra nariz, y luego hasta justo por encima del nivel de los ojos.

Mantra para repetir mentalmente

PARA LOS NIÑOS – Si están acostumbrados a oír a sus padres, los niños también utilizarán el mantra de forma espontánea. Anímales a repetirlo cuando estén a punto de “explotar” o cuando les espere una prueba difícil (cita con el dentista, primera salida nocturna, etc.).

Busca tu mantra, encuentra las palabras que resuenan en tu corazón y te dan el empujón adecuado, y repítelas mientras practicas yoga, durante las esperas o los tiempos muertos, o en los momentos difíciles. Te guiarán, como un faro, a través de las tormentas de la vida.

Beneficios del mantra

Los mantras son sílabas sagradas, palabras o versos enteros de la antigua lengua sánscrita india. Existen desde hace miles de años. Los mantras tienen su origen en los primeros pueblos de la India, Mongolia y el Tíbet, cuyos videntes chamanes se dieron cuenta desde el principio de los efectos positivos de los ritmos de los tambores. Tradicionalmente, en esta época, se pasaban de maestro a alumno.

Hoy en día, hay millones de mantras diferentes para todo tipo de situaciones de la vida a los que recurrir. Sin embargo, se dividen a grandes rasgos en dos supergrupos diferentes de versos sagrados: los llamados mantras Moksha y Siddhi. Los mantras de Moksha están destinados a conducir a la liberación y la iluminación, como el famoso Mantra OM. Los mantras Siddhi, por otro lado, están destinados a liberar ciertos poderes y energías, por ejemplo, mantras de protección y curación.

En este mantra queda clara una gran filosofía básica del yoga: todos somos uno y estamos conectados. Este mantra nos recuerda que podemos contribuir al bien común con nuestras palabras y acciones, y deja clara la importancia de la atención plena y la empatía.