¿Qué cosas no perdona un hombre?

Perdónalos porque no saben lo que hacen

Los estudios neurocientíficos han demostrado que el proceso del perdón implica a regiones cerebrales relacionadas con la empatía, la atención, la memoria y la cognición social, y que experimentar las mencionadas emociones negativas durante mucho tiempo aumenta la incidencia de los trastornos cardiovasculares.  Teniendo en cuenta los beneficios que aporta el arte de perdonar, tal vez merezca la pena plantearse la pregunta: “¿Cómo se perdona?”, entendiendo que para hacerlo hay que estar todavía convencido de querer hacerlo.

Perdonar pero distanciarse

Si pensamos que la palabra “Perdón” viene del latín y significa “dos veces don”, nos damos cuenta de que este sentimiento, para ser considerado como tal, debe ser gratuito y espontáneo, como un regalo que se hace no sólo a los demás, sino también a nosotros mismos: porque, gracias al perdón, podemos ser útiles sobre todo a nosotros mismos y dejar de lado sentimientos como el odio y el resentimiento: sentimientos que sólo pueden desgastarnos por dentro.

¿No te convence esto? ¿Crees que nunca podrás perdonar un mal sufrido? Probablemente tengas miedo: quizás tengas miedo de volver a sufrir, o de que te decepcionen una vez más. Pero intente por un momento contextualizar sus temores: fundados o no, nunca sabrá si tienen sentido.

Sinónimo de perdón

Los motivos para ser infieles son diferentes y varían según la pareja: pueden ser razones relacionadas con las características personales del hombre o de la mujer o tener que ver con la dinámica de la pareja.

En los momentos en que todo parece fosilizado y estás a punto de volver a caer en la trampa de poner las cosas en contra, respira hondo y detente. Recuerda tu amor por tu pareja, y exprésalo, ofreciéndole un hombro solidario, para que juntos podáis reconstruir un amor con futuro.

Perdonarse a sí mismo

En mi opinión, John Gray simplemente revela con una forma popular de escribir cómo relacionarse con el sexo opuesto y entenderse a sí mismo sin frustraciones. Así que aplaudo sus libros y me quito el sombrero ante Ilaria Cardani con sus artículos, que aunque repita conceptos trillados, estoy convencida de que muchas mujeres de carrera y mujeres inteligentes, que quizás pierden su tiempo creyendo en los halagos de ciertos imbéciles, necesitan leer.

Soy una mujer de 35 años, no hermosa. Créeme que con el sexo apasionado puedes conquistar a un hombre (yo lo he hecho, también he tenido muchos encantos). Si me permites ser vulgar, los hombres no piensan con el cerebro sino con la “polla”.

Hola Serena, yo también soy como tú: clara, directa y espontánea y tengo que decir que funciona y crea un buen vínculo, pero me he dado cuenta de que si un hombre tiene problemas propios e independientes de mí, entonces se acaba y en este punto creo que es incluso mejor.