¿Cuál es el primer estado del yo?

Berna

Los aspectos del Niño Adaptado son el positivo, que acepta las normas, coopera y actúa para hacerse aceptar, y el negativo, que se somete a las normas, se apiada y sufre para hacerse aceptar.

Hay cuatro posiciones existenciales y describen cómo una persona se ve a sí misma y a los demás. Los signos + y – en las siguientes descripciones indican una afirmación positiva o negativa referida a la posición existencial:

S = Cambio de roles (o Huelga) que se produce en un momento determinado del juego (Francisco empieza a molestar en clase acosando a la profesora; la profesora, víctima de su actitud, siente que no puede dominarle).

Un conjunto de estímulos reales que el cuerpo percibe de su entorno a través de los cinco sentidos en el aquí y ahora (hic et nunc). Las deficiencias suprimen, restringen y deforman los estímulos percibidos en el Aquí y Ahora, impidiendo su uso para la Resolución de Problemas.

Jacqui Schiff “se presentaba a sí misma como una obradora de milagros, curando a los esquizofrénicos a través del Análisis Transaccional, haciéndolos retroceder y luego regenerándolos, una solución económica milagrosa en una América donde la hospitalización pública estaba en permanente crisis financiera.”

Ejemplos de análisis transaccional

El nacimiento oficial del Análisis Transaccional se remonta a la publicación en 1957 de “Ego States in Psycotherapy”, en el que se definen los conceptos de Estados del Yo y de Análisis Estructural.

En el ámbito de las aplicaciones prácticas, el Análisis Transaccional proporciona un sistema de psicoterapia utilizado en el tratamiento de trastornos psicológicos de todo tipo: desde problemas de la vida cotidiana hasta el tratamiento de formas incluso graves de psicosis. También constituye un método de terapia a nivel individual, grupal, de pareja y familiar.

Prueba para padres, adultos y niños

El estado yoico infantil, guardián de las emociones, los sentimientos, las percepciones, las sensaciones, se refiere a la fase en la que el individuo niño, o infante, realizó su encuentro con el mundo (esencialmente el constituido por los cuidados parentales).

El orden en que se presentan los estados del yo no expresa ninguna jerarquía de valor. Cada uno adquiere su peso específico según el contexto en el que la persona, en ese momento, está actuando y las soluciones que favorece.

Desde este punto de vista, creo que el id y el superego adquieren y mantienen un valor negativo que el ego tiene la tarea de equilibrar a lo largo de la existencia. Es, en definitiva, un conflicto que nunca termina.

Teniendo en cuenta estas consideraciones, creo por tanto que esta forma de tener en cuenta el modelo G – A – B empobrece su valor filosófico, es decir, su expresión de una visión del individuo como un ser en proceso de devenir, como una persona en constante (a veces a pesar de sí misma) cambio, o en todo caso dotada de los recursos emocionales/cognitivos/conductuales necesarios para producir el cambio.

Análisis transaccional berna

Para explicar mejor y poder trabajar terapéuticamente sobre este diálogo interno, el Análisis Transaccional ha dividido los estados del ego en aspectos funcionales. Estos aspectos no sólo actúan en el diálogo interno, sino también en la relación con los demás y en el comportamiento, como veremos más adelante.

Hablando de problemas específicos, se están llevando a cabo muchas investigaciones para validar científicamente el enfoque para el tratamiento de los trastornos depresivos y para el tratamiento de los trastornos de ansiedad. De hecho, parece que el Análisis Transaccional es especialmente eficaz para estos problemas.