¿Cómo explicar el destino?

El hombre nace con un destino ya escrito

Hola han pasado años cuando lo conocí lo mire a los ojos me enamore lentamente lo vi lleno de luz pero luego vi su segunda parte era oscuro me hizo sufrir mucho me dejó en silencio lo siento en mi alma cada vez que lo siento me angustio me quitó la sonrisa me cambió me pregunto cuanto amor es

Creo que siempre me he encaprichado con la idea de él, por lo que una parte de mí dice que nunca podríamos tener un futuro juntos, considerando que sería otro chico más que tendría que ser madre.

Sé que le hice daño en su momento, pero no estaba preparado. A lo largo de los años he aceptado y luego abandonado tres matrimonios. He trabajado mucho en mi crecimiento personal para transformar el dolor, y ahora que me siento libre de dolor y lista por un tiempo, ¡el cielo hace que esto suceda para mí! ¡Gracias por todo lo que me puedan decir!

Diez años de vidas diferentes pero con un vínculo que va más allá del amor físico. Hemos vivido situaciones físicas, temporales e incluso meses de ausencia total de comunicación. Mentalmente seguimos estando ahí el uno para el otro porque juntos nos completamos. A veces basta con un mensaje, un saludo, un “estoy ahí”, incluso sin saber del otro durante meses, pero siempre sabiendo que estamos ahí para el otro. Los encuentros de nuestras miradas se completan mutuamente, un todo incluso sin relación física. Nos criticamos como si los defectos del otro fueran los nuestros, pero el sentimiento que nos une no se desvanece a pesar de la distancia física de vidas paralelas. La distancia de la relación física nunca ha afectado a nuestra armonía mental. Nos sentimos complementarios y ambos nos dimos cuenta de ello.

Qué es el destino

“En este sentido, la suerte se diferencia tanto del destino, que se refiere a los destinos humanos y al que se le permite ser modificable, como del concepto de determinismo (conexión necesaria pero inmanente de las causas de manera que pueda descifrarse racionalmente)”[1][2] En otros autores, el término se considera superponible al de suerte[3].

James Hillman, retomando la concepción heracliteana del destino,[8] hace corresponder la idea de destino con nuestra forma de ser. Por tanto, el destino está determinado psicológicamente por las elecciones que hacemos dictadas por nuestro propio carácter o por las que hacen los demás y que nos afectan condicionando nuestro futuro[9].

El término equivalente a destino en inglés antiguo era doom, como en el Libro de Domesday, el censo de Inglaterra realizado por los normandos en 1086. Más tarde, Doom adquirió las siniestras connotaciones del cataclismo universal del fin de los tiempos (“Doom”, “Last Judgement”).

El destino como frase de elección

Thorwald Dethlefsen, psicólogo y psicoterapeuta alemán, dirige en Múnich el “instituto privado de psicología extraordinaria”, fundado por él mismo, en el que pone en práctica sus particulares terapias sobre la reencarnación y la psicología esotérica.Dethlefsen, con sus textos, nos permite…

Texto fundamental y capital que ilustra las teorías y la práctica clínica de dos padres de la psicología esotérica y práctica en el mundo occidental. Libro completo y bien escrito, fácil de leer, complejo de entender en profundidad, pero hermoso.

Qué es el destino en el amor

Thorwald Dethlefsen, psicólogo y psicoterapeuta alemán, dirige el “instituto privado de psicología extraordinaria” de Múnich, fundado por él, donde pone en práctica sus terapias especiales sobre la reencarnación y la psicología esotérica. Dethlefsen, con sus textos, nos permite comprender mejor nuestra vida y, sobre todo, ver el sentido de la enfermedad y la muerte. La enfermedad y la curación, la hipnosis, la astrología, la terapia de la reencarnación son los temas tratados.

Libro iluminado y hermoso, lo leí en un par de días. Explica diferentes conceptos de forma sencilla, desde la reencarnación hasta la astrología, pasando por la cura homeopática, todo ello en clave esotérica. Cambia mucho tu punto de vista. Lo recomiendo a todos los que están en el trabajo.

Un libro realmente sorprendente. El autor va del esoterismo al psicoanálisis, de la psicología a la analogía, y explica cómo el destino no es en absoluto una fatalidad, sino, por el contrario, como dice el título, una ELECCIÓN; nuestra elección, que a menudo nos resulta incomprensible y extraña, porque surge del inconsciente y de nuestras propias agendas. Cosas de las que casi siempre no somos conscientes. Este libro se adentra en esta parte oscura y nos guía, página tras página, hacia su descubrimiento. Fascinante y muy interesante. Absolutamente recomendable para aquellos que realizan trabajos por cuenta propia.