¿Qué es la fe y por qué se dice que la fe es un estado mental que se puede inducir mediante la autosugestión?
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Hay tres razones básicas para argumentar que las psicoterapias son tratamientos metafóricos. En primer lugar, si las condiciones que los psicoterapeutas buscan tratar no son enfermedades, los procedimientos que emplean no son tratamientos literales sino meramente metafóricos.
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En efecto, no podemos dejar de subrayar, en nuestros esfuerzos por aclarar los orígenes históricos de la psicoterapia moderna, la importancia de la distinción entre el arte mudo del médico del cuerpo y el arte semántico del médico del alma.
Los psicoterapeutas utilizan los tres tipos de discurso retórico. Aristóteles incluso comenta incidentalmente, como si fuera perfectamente obvio -como sin duda lo era en la Grecia clásica- que los consejeros privados se comportan de la misma manera que los hombres que hablan en las asambleas públicas. Aquí sale a relucir el error de categoría de la psiquiatría moderna: nadie cree hoy que lo que hacen los políticos constituya una forma de tratamiento médico, pero muchos creen que lo que hacen los psiquiatras es un tratamiento médico.
Frases sobre la fidelidad
Las nubes producen lluvia sin nuestro permiso, el sol sale y se pone sin pedir permiso, y el invierno llega inexorablemente con vientos fríos, nieve y escarcha, y no podemos hacer nada al respecto, sólo podemos protegernos.
Al centrarnos en nuestros problemas, nuestras desgracias, nuestros males, atraemos otros problemas, otras desgracias y otros males. Al herirnos a nosotros mismos, dañamos mortalmente nuestra mente inconsciente, nuestro cuerpo, y atraemos más problemas.
Siempre que pensamos en los asuntos de los demás en lugar de en los nuestros, cuando arremetemos contra Dios, contra los padres, contra la pareja, contra los jefes de la oficina, contra los compañeros, contra los políticos que, en el mejor de los casos, son corruptos y oportunistas, y contra las inclemencias del tiempo… nos comportamos de forma irresponsable y provocamos ansiedad, frustración, contracciones dolorosas y enfermedad.
En cuanto imaginamos algo malo que nos puede pasar a nosotros o a nuestros seres queridos, se desencadena la ansiedad y el miedo y, a veces, incluso el pánico porque experimentamos el hecho imaginado como si fuera cierto e inminente.
Frases sobre Dios y el amor
La Nueva Era expuso los temas principales en la emblemática canción ‘Aquarius’. El idealismo de los años sesenta y setenta aún sobrevive en algunos círculos, pero ahora no sólo participan los adolescentes. Los vínculos con la ideología política de izquierdas se han desvanecido y las drogas psicodélicas no tienen ni de lejos la importancia que tenían antes. Las tendencias “espirituales” y “místicas”, antes limitadas a la contracultura, forman ahora parte de la cultura dominante y conciernen a diferentes aspectos de la vida como la medicina, la ciencia, el arte y la religión y la propia concepción antropológica.
Me refiero a la calidez del pranoterapeuta, a la dicha de la meditación, a la aparente paz que se siente al practicar estas técnicas y a las coincidencias que se producen cuando se empiezan a abrir ciertos canales.
Los primeros, los seculares, pretenden curar a través de una energía (no identificable) presente en las cosas. Entre ellos podemos mencionar los medicamentos homeopáticos, los cristales, las piedras y los minerales en general, la curación a través de los colores, que se componen precisamente de frecuencias electromagnéticas emitidas por las cosas.
La fe es creer en lo que no puedes ver
La propia organización de la clínica se basa en el modelo organicista: las enfermedades se dividen en departamentos como las mercancías en un supermercado; y los médicos, que se mueven de cama en cama como técnicos en una cadena de montaje, se dedican a descubrir la causa del mal funcionamiento para reparar el órgano enfermo.
Todavía podemos sonreír ante las medidas de precaución de los estadounidenses ricos que tienen sus cuerpos congelados en previsión de ser devueltos a la vida por futuros milagros de la medicina; en cambio, debemos preocuparnos seriamente cuando consideramos el daño psicológico causado por la eliminación de las imágenes de la muerte. Según algunos psicólogos, esta eliminación está en el origen del comportamiento neurótico generalizado 13.
En la comprensión teológica de la Iglesia de sí misma, los gestos de amor y servicio hacia los enfermos, los pobres y los marginados (“diakonía”) tienen un significado que trasciende el de la filantropía en el sentido humanista: ellos mismos son parte de la “leiturgia”, es decir, del servicio divino, y por lo tanto tienen un significado sacramental. Un teólogo ha sido capaz de establecer un feliz paralelismo entre la “comunión” a través del vaso de agua fresca ofrecido al sediento y la comunión eucarística a través del cáliz de bendición: “Son dos sacramentos íntimamente relacionados y, en definitiva, inseparables, porque derivan del mismo Señor encarnado. La comunión con Dios en la mano que toca al leproso constituye una con la comunión con Dios en la mano que parte el pan en el Cenáculo” 16.