¿Qué dice el Salmos 27 10?

Pasajes bíblicos sobre la relación padre-hijo

David pide y busca habitar en la casa de Yahveh todos los días de su vida. Así debe ser la existencia de un hijo de Dios: todos los días, sin intermisión, sin pausa, sin interrupción.

En la última parte, el salmista dirige otra oración a Yahveh:_”Enséñame tu camino” y “guíame por una senda recta”.    A menudo no hacemos esta petición al Señor, porque queremos seguir nuestro propio camino, nuestro propio pensamiento, y no el del Señor. A veces pedimos al Eterno que nos ayude en nuestro camino, y muchas veces el Eterno no nos responde.

Salmo 27 Biblia de Jerusalén

Consulta los versículos y las citas bíblicas que aparecen a continuación para ver ejemplos específicos de las Escrituras sobre la pérdida. Hemos recopilado una lista de versículos bíblicos sobre la pérdida para ayudarle a escribir un mensaje significativo y sincero en su tarjeta de pésame, en sus regalos de pésame o en la decoración de su casa como placas y fotos.

Alaba al Señor, alma mía, y no olvides todos sus beneficios: que perdona todos tus pecados y cura todas tus enfermedades, que redime tu vida de la tumba y te corona de amor y compasión

proclamar el año de gracia del Señor y el día de la venganza de nuestro Dios, para consolar a todos los que lloran, y proveer a los afligidos de Sión, para darles una corona de belleza en lugar de cenizas, el óleo de la alegría en lugar del luto, y un manto de alabanza

Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto. Entonces puso su mano derecha sobre mí y me dijo: “No tengas miedo. Yo soy el primero y el último.  18 Yo soy el que vive; estaba muerto, y ahora mira, estoy vivo para siempre. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

Salmo 27 3

Al igual que sólo los sacerdotes podían entrar en el santuario (cf. 2 Crónicas 23:6; Hebreos 9:1-7), David quería experimentar el disfrute ininterrumpido de la presencia del Señor durante toda su vida, tener una relación espiritual íntima con el Dios de su casa.

Más bien, se refería a ver la belleza del carácter del Señor con los ojos de la fe, o a descubrir o experimentar de nuevo lo poderoso, bueno y misericordioso que es el Señor a través de su manifestación, o ambas cosas.

Juan Calvino escribió que el salmista: “Declara que no desea nada, ni en el cielo ni en la tierra, sino sólo a Dios, y que sin Dios, todos los demás objetos que suelen atraer el corazón de los hombres hacia ellos no le resultaban atractivos.

Así pues, aunque no está mal rezar a Dios por nuestras necesidades (Mateo 7:7-11; Filipenses 4:6; 1 Pedro 5:7), por el contexto vemos que el salmista reza para que el Señor le proteja de sus enemigos (Salmo 27:11-12), la oración no debe ser principalmente una forma de recibir cosas de Dios, sino que debe tener como objetivo a Dios mismo.

Salmo de la confianza en el Señor

En la audiencia general, el Papa dedicó su catequesis al Libro de los Salmos, el libro que enseña a rezar. Y subraya: para rezar basta con ser lo que somos, incluso en los sufrimientos de la vida Dios escucha y no abandona. Llamamiento final para que se respeten las normas anti-condominio

En los Salmos, continúa Francisco, encontramos las palabras para expresar nuestros sentimientos, para alabar, para agradecer, para invocar a Dios en la alegría y en el sufrimiento. En estos textos no encontramos personas abstractas, y no “nacen de una mesa”, sino que se basan en la experiencia vivida.