¿Cómo es una persona con gula?

Codicioso

En los momentos previos a la comida, la persona puede estar demasiado involucrada en la planificación de la misma. Puede pensar en ello excesiva y obsesivamente. De hecho, algunas personas con un Trastorno de la Conducta Alimentaria se quejan de que la comida está inexorablemente en la cima de sus pensamientos, “el primer pensamiento cuando me despierto y el último cuando me duermo”.

Los trastornos alimentarios son más frecuentes en los países industrializados que en los países en desarrollo, hasta el punto de que algunos sostienen que son una consecuencia directa de los valores distorsionados que expresa la cultura del primer mundo, como el culto a la delgadez y el mantenimiento de la juventud a cualquier precio.

Significado de glotón

El Canto VI del Infierno de Dante Alighieri tiene lugar en el tercer círculo, donde se castiga a los glotones; estamos en la noche del 8 al 9 de abril de 1300 (Sábado Santo), o según otros comentaristas entre el 25 y el 26 de marzo de 1300. En este Canto se aborda un tema político, como en todo Canto VI.

Cuando Cerbero ve a Dante y a Virgilio, abre la boca y les muestra sus colmillos, sin contener un solo músculo. Entonces Virgilio extiende las manos y lanza a sus codiciosos colmillos (gargantas, según un lenguaje trivial) dos puños llenos de tierra, que el sabueso se apresura a comer, como esos perros que ansiosos por una comida ladran y se detienen inmediatamente en cuanto la consiguen.

En las tres faltas (orgullo, envidia, avaricia) se sintetiza el juicio de Dante sobre la historia de la Comuna, profundamente minada por las envidias surgidas entre los partidos, por el orgullo y el afán de dominio tanto de los grandes como del pueblo, por la avaricia y la codicia mercantil[1].

Goloso” en español

Continuando su descenso a los infiernos, Dante encuentra -en el 6º Canto del Infierno- el segundo grupo de condenados: los glotones. Estamos en el Tercer Círculo, en el Infierno Superior: es un lugar afectado por una incesante lluvia sucia y helada que, al mezclarse con el suelo, crea un asqueroso lodo maloliente.

En este punto, Dante pide al alma más información, sobre todo en lo que se refiere a la suerte de ultratumba de aquellos florentinos tan comprometidos con la vida pública, como Farinata Degli Uberti, Tegghiaio Aldobrandi, Iacopo Rusticucci y Mosca dei Lamberti. Ciacco le explica que todos están condenados en círculos inferiores al que él se encuentra. Finalmente, antes de volver a caer en el fango con las otras almas glotonas, le pide a Dante que le recuerde a los vivos una vez que regrese a la Tierra.

Aunque las referencias a la esfera política están presentes en toda la obra, es específicamente el Canto VI de los tres cánticos el que se dedica a este tema, en una progresiva ampliación del ámbito de reflexión:

Codiciosos contrarios

Durante y después de la ingesta de azúcar, el cuerpo y la mente recuperan el equilibrio, los síntomas se disuelven (aunque sólo sea momentáneamente) y los sentidos del “glotón patológico” se ven muy gratificados.

Recuperación de energía y poderosa desintoxicación del organismo, pero también enorme ayuda para el sistema inmunológico. ¿Hablamos también del dinero que se ahorra en complementos alimenticios de fibra o multivitamínicos?

En particular, los principios activos contenidos en las mezclas de flores de Bach, tomadas durante algunas semanas y con constancia, pueden interferir con la demanda continua de azúcar del cuerpo, pero sobre todo de la mente.

Los fármacos en cuestión son la vareniclina y el bupropión, fármacos antagonistas de los receptores de la nicotina que parecen inducir un mecanismo compensatorio que reduce el deseo de comer dulces, similar al del tabaco.