¿Cuál es el santo de la tranquilidad?
Oración al Espíritu Santo por la paz del corazón
En 1499, el Papa Alejandro VI dio su visto bueno a la creación de una cofradía romana con el nombre de San Roque, mientras que en 1547 el Papa Pablo III lo incluyó en el Martirologio Franciscano al mencionar en la bula cum a nobis que San Roque pertenecía a la Tercera Orden Franciscana[45].
Contenidos
En 1590, el Papa Sixto V pidió al embajador veneciano en Roma, Alberto Badoer, que procurara información sobre la vida y los milagros del santo para poder canonizarlo oficialmente,[45] y posteriormente el Papa Gregorio XIV hizo inscribir su nombre en el primer Martirologio Romano:[45].
El 16 de julio de 1629, el Papa Urbano VIII invocó “para sí y para todo el pueblo romano” la protección de San Roque contra las epidemias, y finalmente aprobó su culto con un breve apostólico el 26 de octubre del mismo año. La Congregación de Ritos concedió un oficio propio y una misa a las iglesias construidas en honor del santo[47].
En Francia, la devoción a San Roque experimentó un nuevo desarrollo en el siglo XVII,[6] aunque la progresiva desaparición de la peste en Occidente a partir de ese siglo, produjo una evolución del papel de San Roque como intercesor contra otras epidemias[59].
Oración para calmar a una persona
[us_btn label=”Descargar el pdf “una paz muy profunda”” link=”url:http%3A%2F%2Fwww.testadp. cloud%2F2020_01_adoración-euscaristic%2F||target:%20_blank|” style=”5″ align=”center” custom_width=”200px” css=”%7B%22default%22%3A%7B%22font-size%22%3A%2216px%22%7D%7D”][us_separator size=”small”]por las Hijas de la Iglesia de “María Alegría del Cielo”
– Muchos cristianos, querrían hacer presente a Cristo para muchos otros; año en que la Iglesia no existe sólo para sí misma, sino para el mundo, para que se deposite en ella una levadura de paz. Perdónanos, Señor, si nuestras vidas dan testimonio de lo contrario y no somos levadura de paz.
Oración para pedir fuerza y valor
El Hijo vino entre nosotros, enviado por el Padre, asumió nuestra condición humana, semejante a nosotros en todo menos en el pecado, para que el pecado de los hijos de Adán fuera superado y la justicia y la misericordia del Padre se manifestaran a todos.
Los que le crean y le reciban en la persona de cada hermano ‘reinarán con Él en la vida eterna’… Los que no le crean y no le reciban conocerán la muerte segunda que no tiene fin…
Entonces decidió publicar una proclama en la que se ofrecía un premio a quien consiguiera que ese pájaro volara. Al día siguiente, el rey vio al halcón volando entre los árboles del jardín. Pidió conocer al autor del “milagro”.
Cada año, en este día, los filósofos salen de sus oscuras cuevas; los pensadores, de sus frías celdas; los poetas, de sus árboles imaginarios, y todos se paran reverentemente en esa montaña silenciosa para escuchar la voz de un joven que dice de sus asesinos: “Oh, Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”.
Perro de San Roque
La Iglesia compara esa muerte, ahora con un sueño apacible, como el de un niño que se duerme en el pecho de su madre; ahora con una antorcha odorífera, que se consume al arder, y que muere exhalando el dulce perfume que penetró en su sustancia.
La santa muerte de José dio un fruto precioso en la tierra, que fue como aromatizado por el dulce perfume que deja de por sí una vida santa, y una muerte santa, y dio a los cristianos un poderoso protector en el cielo con Dios, especialmente para los moribundos.
