¿Cuál es la diferencia entre el yo y el ego?

Ego espiritual

Volvamos a partir del clímax del sueño ejemplar de la inyección a Irma. Continuando la investigación onírica de la víspera, llegamos a la apertura, a esa boca abierta en cuyo fondo Freud ve la imagen terrorífica y compuesta que hemos comparado con la revelación de la cabeza de Medusa.

Este sueño, ya lo saben, resulta ser extremadamente rico, y las asociaciones que pone en marcha conducirán a Freud y a su sujeto nada menos que al descubrimiento puramente supuesto y reconstruido de la escena primaria.

La dialéctica de la conciencia tiene aquí su punto de partida en la tensión entre el sujeto -que no podría desear sin estar fundamentalmente separado del objeto- y el yo, del que parte la mirada hacia el objeto.

En esa Terrible, pero a la vez Fascinante, Aparición en el fondo de la boca abierta de Irma o en las fauces de los Lobos – se revela, dice Lacan, algo único, la Roca contra la que el soñador se estrella y se rompe en los mil pedazos y múltiples colores del espectro de sus diferentes yoes.

Por qué se forma el ego

El trabajo de Anna Freud sobre los mecanismos de defensa fue sólo el comienzo del trabajo en torno a las defensas del ego que la gente suele utilizar. Desde entonces, los psicólogos han utilizado el concepto de mecanismos de defensa y han enseñado a sus clientes a reconocer su propio uso de estos mecanismos.

Cuando utilizas la proyección, ves tus rasgos en otras personas mientras no ves esos mismos rasgos en ti mismo. Al centrarte en la otra persona que tiene el rasgo, te distraes de verlo en ti mismo. A través de la proyección, intentas proteger tu ego culpando a otra persona.

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Cómo luchar contra el ego

En el camino de vuelta a nosotros mismos, las vidas adormecidas en el corazón se despiertan y cuentan un rayo de luz que conduce a Dios, siguiendo la esencia del uno: el aroma de las flores de acacia. La exposición de casos clínicos reales y su cuidadosa interpretación encajan en una síntesis unificada, donde el núcleo simbólico de la acacia es una clave importante.

Depende de cómo queramos verlo. Depende de la energía que invirtamos en nuestro dominus interior y del poder que le concedamos. A medida que crecemos, a medida que cometemos errores, a medida que nos causamos dolor a nosotros mismos y a los demás, aprendemos a no fortificar el ego con luz, con sangre vital que, en consecuencia, nos quita el alma.

Significado del ego

Pero en última instancia estamos hablando -al menos según las primeras definiciones de Freud- de ese algo al que nos referimos cuando usamos el pronombre “ego” (al que he dedicado una serie de encuentros llamados “exploraciones del ego” y sobre el que puedes encontrar un par de artículos interesantes pinchando aquí).

Desde las cavernas, hemos contado quiénes somos con imágenes dibujadas e historias contadas. Recojo estas historias antiguas, descifro las imágenes con las que nos representamos hoy y me dedico a pensar en el futuro.

La investigación sobre el tema de la Imaginación me lleva a adentrarme en los territorios de la narrativa, como el mito, el cuento de hadas y el mundo de lo fantástico; y en las regiones del pensamiento, desde el esotérico hasta la filosofía académica, profundizando en temas como el pensamiento visionario, reflexivo, crítico y estratégico.

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